En agosto de 2020, con apenas 12 años, Pau Enric Olivera Salvador, entró en el radar del coordinador masculino de selecciones del handball uruguayo tras compartir en redes algunos goles y movimientos que captaron la atención de en ese entonces Jorge Botejara.

 Creciendo con el Sant Esteve catalán, obteniendo títulos con su equipo y el seleccionado provincial, Pau fue contratado por el poderoso Barcelona donde integraría el ‘blaugrana” por una temporada.

 Los intentos por traerlo a defender a la Celeste Menor del momento, se vieron truncados en pandemia, dejando en un deseo nuevamente la posibilidad.

 Pero todo esfuerzo tiene recompensa y con el tiempo transcurrido en 2024 no solo integró la Cadete viajando Al Sur Centro de Paraguay sino también la Juvenil en Managua (Nicaragua), y con ésta última logró la histórica primera clasificación a un Mundial de la categoría.

Hoy vive un presente que pone como claro ejemplo para quienes están lejos del área metropolitana uruguaya que, ¡SE PUEDE!.